Frase célebre aleatoria

miércoles, febrero 10, 2010

¿Enojo?

¿Se cree usted más listo que un chimpancé o algún homínido semidesarrollado?

El enojo es una reacción de defensa orientada a protejer los intereses primitivos de las criaturas. En un principio, el enojo estaba diseñado para empujar al cuerpo a generar una reacción violenta o agresiva ante un estímulo negativo o desfavorable. Este tipo de comportamiento se puede apreciar en los primates considerados más evolucionados intelectualmente, claro después de los seres humanos.

En una sociedad que funciona principalmente bajo las órdenes de un lider, ya sea en matriarcado o patriarcado, en el caso de que alguno de los subalternos ofendiese al dirigente, ya sea por alimentarse antes o por intentar aparearse, el enojo surge. El líder rápidamente reacciona violentamente, hiriendo y en muchos casos asesinando al "agresor" por factores que nosotros los "evolucionados" consideraríamos irracionales.

Pero...¿Qué tan racional es usted?

Pensemos en un enojo cualquiera, a la hora del desayuno. Espera despertar de un plácido sueño, después de todo un día de trabajo, con la ilusión de encontrar como siempre el desayuno listo, con sus platillos favoritos. Con ansia espera degustar el combustible que le hará funcionar hasta que la próxima carga de nutrientes se haga llegar.

Despierta y no hay desayuno, no hay nada en lo absoluto. La persona encargada de prepararlo por una u otra razón le ha fallado. Ahí comienza todo el caos. Los químicos encargados de las emociones detectan que ha sido ofendido, ha sido decepcionado, es hora de generar una reacción.

La sociedad humana evoluciona millones de veces más rápido de lo que lo hace la fisiología y neuroquímica, los cimientos del cerebro siguen siendo tan arcaicos como los más frescos fósiles.

Se detona la reacción química maestra, aumenta el latido del corazón, cambia el metabolismo y la adrenalina fluye. Usted busca resanar su orgullo de lider, básicamente, porque cree que es líder.

Ahí es cuando se empieza a hacer notar el enojo, cambia la manera de hablar, cambia la manera de ver la vida. Usted tiene razón, es todo lo que le importa.

En otras épocas hubiera asesinado por ese desayuno perdido, pero hoy... ¿lo considera racional?.

¿A dónde lo lleva el enojo?. Si aplica usted la filosofía de la duda ante todo, y se aplica a buscar el porqué de las múltiples situaciones en las que se vé inmiscuido, podrá entonces aplicar ese resquicio de "civilización" que se ha generado através de años de evolución.

Está molesto, enojado, en el peor de los casos fúrico. La ira no le traerá el desayuno, eso podría apostarlo. Esa emoción no le trae nada fructífero.

Si usted formara parte de alguna tribu prehistórica, o de alguna familia de mamíferos antropomórficos pre-humanidad, sería lógico que reaccionara de una manera violenta, irascible, se vé en la necesidad de reestablecer su honor, su orgullo, de reafirmar el puesto de lider que ha tenido.

Está leyendo esto, por tanto estoy seguro de que cree que posee una inteligencia superior a un ser prehistórico o algo diferente de un homo-sapiens.

Hoy en día, el humano se ve en la necesidad de convivir en una sociedad más o menos democrática, en la que la opinión generalizada es más importante que el orgullo o el honor de ser líder.

¿Vale la pena enojarse?

Está estudiado y documentado en cientos de artículos científicos que el enojo es una de las causas principales del stress, y por tanto, un eslabón más en la cadena que culmina con muchas enfermedades psicofisiológicas.

Se enoja, no hay desayuno, tiene hambre, el anhelo de un buen desayuno y un buen día se han desvanecido. La reacción normal es el enojo.

Su cuerpo se altera y comienza a lanzar maldiciones. Generalmente lo que le queda de razón empieza a arrojar preguntas como: ¿porqué no está mi desayuno?, ¿dónde está la persona encargada de hacerlo?,¿de que manera habré de reprenderlo?.

Ahí radica el error principal del enojo.

El enojo envía toda la atención hacia el "culpable", que no siempre tiene que ser un ser vivo. Enfoca la carga emocional a buscar un culpable, a alguien en quien dejar caer el peso de la frustración que le ha sido causada.

Pero, ¿se había puesto a pensar en las causas REALES de tan desafortunado evento, como no tener desayuno?. En caso de que hubiera un responsable, ¿las causas de su fallo, fueron analizadas a conciencia, determinando la verdadera gravedad de su falta?.

Los psicólogos de la actualidad ven al enojo como una emoción natural, primaria y madura; experimentada por los seres humanos desde el inicio de los tiempos, así como algo de gran valor para la supervivencia. La ira puede movilizar una gran cantidad de recursos psicológicos para una acción correctiva. Sin embargo la ira sin control puede afectar negativamente de manera social y personal.

¿Realmente el enojo es la vía para resolver el problema que se le plantea?, ¿Al alcanzar los niveles máximos de ira obtendrá su desayuno?.

No. Lo único que obtendrá al alcanzar esos niveles es aumento de adrenalina y noradrenalina.

¿Ya que la obtuvo, se la puede desayunar?

Tampoco.

La adrenalina y la noradrenalina son hormonas segregadas a manera de detonador de una respuesta en torno a la acción que el cerebro primitivo considera violenta. Aumenta el flujo sanguíneo incrementando el ritmo cardiaco, con ésto aumenta la presión arterial. Se incrementa también de manera notable la disponibilidad de glucosa en la sangre. El cerebro prepara al cuerpo para una acción física increíble, una huída o una batalla.

Si se cree evolucionado no peleará ni llegará a nada físico; entonces todo eso que ha hecho su cerebro de manera automática no ha servido para nada. Sólo ha sido una sobrecarga inútil de químicos que ahora inundan el sistema nervioso y el metabolismo.

Del aumento de presión arterial y el ritmo cardíaco, viene el riezgo de infarto cardíaco, infarto cerebral, derrame cerebral o rotura de vasos saniguíneos no cerebrales pero vitales para el correcto funcionamiento del cuerpo. Ésto porque el cuerpo se prepara para dar una irrigación extraordinaria a los músculos, de manera que estén bien oxigenados y en correctas condiciones para la desición que se tome en el fondo del sistema nervioso: atacar o huir.

Del incremento en la disponibilidad del azúcar (glucosa) en la sangre, viene la sobresaturación del metabolismo natural. Hay glucosa para que los músculos tengan energía de sobra para llevar a cabo las acciones que decidiría el cerebro primitivo, pero no el "evolucionado". El cerebro que se cree evolucionado, no asesinará a nadie por un desayuno. El metabolismo está sobrecargado. El cuerpo requiere de una gran cantidad de sustancias para poder "digerir" toda esa glucosa que ha sido liberada, que, a contrario de la voluntad del cerebro primitivo, no ha sido utilizada por los músculos para generar energía y movimiento. Ésta cantidad increíble de químicos necesarios para metabolizar la glucosa, es dirigida por una hormona, la insulina.

Tal sobrecarga de trabajo, hace que el principal productor de insulina, deje de hacerlo, como una máquina que se sobrecalienta y se funde. Nunca jamás vuelve a trabajar.

Demás alteraciones del sistema nervioso central y periférico son detonadas por eventos de ira o enojo temporalmente distanciados entre sí.

¿Sirvió para algo su enojo?

Felicidades, ahora tiene diabetes.


Y para colmo, sigue sin desayunar; el chimpancé ya hubiera desayunado.


***FIN DE LA PEDRADA PARA MI SUEGRA DEL COMUNICADO***

1 comentario:

Unknown dijo...

hola hola gracias x tu comentario anterior muy bueno x cierto "tigre" jeje me agrada tu forma de pensar espero estemos en contacto y nunca dejes de escribir